El descubrimiento de restos del AF-447 de Air France desaparecido en la costa de Brasil el 1 de junio de 2009, con 228 pasajeros de 32 nacionalidades (en su mayoría franceses) cuando regresaba a París desde Río, permite esperar importantes revelaciones de gran alcance penal, tecnológico y humano.

Nathalie Nosciusko-Morizet, ministra de Ecología, cree en la posibilidad de acontecimientos que algo tienen de milagroso. Veintidós meses después de un accidente en alta mar, se han descubierto cuerpos humanos que pudieran ser reconocibles. Las temperaturas del agua marina, a 3.000 metros de profundidad, y las condiciones del aparato, han conservado un número impreciso de cadáveres. «El descubrimiento ha sido un choque para las familias y para el restablecimiento de la verdad. Esos cuerpos serán rescatados», comenta la ministra. El rescate comenzará dentro de un mes, aproximadamente.

Las investigaciones sobre el accidente del AF-447 de Air France se han prolongado desde hace cerca de dos años, hasta que ayer tarde los directivos del «Bureau d’enquêtes et d’analyses» (BEA) pudieron presentar las fotografías de algunos restos del avión, tomadas el fin de semana pasado en el Atlántico sur. Los robots han podido fotografiar los motores, el tren de aterrizaje y restos diversos de la arquitectura del Airbus A330. Han sido «acordonadas» todas las inmediaciones del lugar donde se han descubierto los restos del avión. Y se espera encontrar sus cajas negras en un plazo de semanas o meses.

Hasta ahora, ninguna hipótesis sobre el accidente ha podido confirmarse plenamente, aunque muchos técnicos insisten en el posible fallo de las sondas tipo Pitot que equipan los A330 y A340 de Airbus. Airbus y Air France han sido inculpadas por posible homicidio involuntario.

Fuente: www.abc.es